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Mientras que a nivel nacional el 12% de los niños y niñas menores de 5 años presentan desnutrición crónica (baja estatura para la edad), en población desplazada este valor asciende a 23%. El 7% de los niños y niñas menores de 5 años presentan bajo peso para la edad (desnutrición global) pero entre niños y niñas en situación de desplazamiento se duplica este porcentaje (14%).

De acuerdo con los resultados de la ENDS 2005, la desnutrición en menores de 5 años es mayor en el área rural, en familias pobres y numerosas y donde las madres tienen bajo nivel de educación. Es más alta en departamentos como La Guajira, Boyacá, Cauca, Nariño y Córdoba. En los niños y niñas de 5 a 9 años la desnutrición es menos prevalente que en aquellos menores de 5 años. Un 13% presenta retraso en el crecimiento, 5% bajo peso para su edad y 1% bajo peso para su estatura.

La prevalencia de anemia por deficiencia de hierro en la niñez es un problema de alta relevancia para el país. Se estima que 1 de cada 2 niños(as) entre los 1-2 años tiene anemia. Entre las mujeres en edad reproductiva (13-49) la anemia afecta a 1 de cada 3 y entre las mujeres gestantes la incidencia es 44.70% (2). El estudio realizado en población desplazada reporta que el 55% de las mujeres en edad fértil y el 60% de las mujeres gestantes en situación de desplazamiento presentan anemia, siendo mayor en la población desplazada que en la población de estrato 1 receptor.

Como se puede ver en el gráfico a continuación (ver gráfico), las causas de la vulneración del derecho a la alimentación son múltiples y se relacionan con las condiciones económicas y sociales de la población, la política agroalimentaria nacional y las situaciones de violencia. La pobreza y la inequitativa distribución del ingreso, el desempleo y subempleo, el bajo nivel educativo de algunas familias, los estilos de vida no saludables, la baja autonomía de las mujeres y el ambiente insalubre, así como los procesos migratorios y conflictos sociales son algunos de los factores que contribuyen a la vulneración del derecho a la alimentación.

 

Lactancia materna

La lactancia materna es el alimento por excelencia que proporciona todos los nutrientes necesarios para el óptimo crecimiento, el desarrollo cognitivo, la protección de un gran número de enfermedades comunes durante los primeros meses de vida y el fortalecimiento del vínculo afectivo madre-hijo(a) con lo cual se favorece el buen trato. La lactancia materna exclusiva hasta el sexto mes de vida y la lactancia continuada con alimentación complementaria adecuada hasta los dos años de edad, están definidas por la Asamblea Mundial de la Salud y ratificadas por Colombia como norma de alimentación del lactante y el niño pequeño. En Colombia la duración mediana de la lactancia materna exclusiva según cifras de la Encuesta Nacional de Demografía y Salud de 2005, es de 2.2 meses; pero en algunos departamentos es inferior a 1.5 meses, un nivel muy por debajo de los 6 meses recomendados internacionalmente (3). La práctica de la lactancia es mayor en zona rural, en subregiones de Costa Atlántica con San Andrés, Bogotá, Cauca y Nariño. La duración total de la lactancia materna es de 14.9 meses, la cual se encuentra en camino avanzado de la recomendación internacional hasta los dos años de edad.

(1) ECHO-PMA-OPS. Estado Nutricional, de alimentación y condiciones de salud de la población desplazada por la violencia en Colombia. 2005

(2) Ibid

(3) Encuesta Nacional de Demografía y Salud y la encuesta Nacional de Nutrición y Alimentación, 2005. PROFAMILIA e ICBF.

 

http://www.unicef.com.co/situacion-de-la-infancia/nutricion/ 

​Nutrición

El derecho de los niños y niñas a la nutrición está protegido por la Convención sobre los Derechos del Niño y por la Constitución Política de Colombia. Gozar de buena nutrición es para los niños y niñas un requisito esencial para que puedan disfrutar de sus derechos a la vida, al desarrollo y a la protección. Sin embargo, el bajo peso al nacer y la desnutrición afectan a un número importante de niños y niñas colombianos. Los recién nacidos con bajo peso tienen un riesgo significativamente mayor de enfrentar, desde los primeros momentos de su vida, serios problemas de salud y desarrollo. Por su parte, la desnutrición aumenta la probabilidad de enfermedad y de muerte de los niños y reduce su capacidad de aprendizaje y bienestar.

Las condiciones nutricionales de la niñez en Colombia han mostrado una tendencia favorable en los últimos 10 años, como se evidencia a partir de la evolución de los valores promedio de los principales indicadores sobre el tema. No obstante, los resultados de la Encuesta Nacional de Demografía y Salud 2005 y un estudio realizado para examinar las condiciones nutricionales y de salud de la población desplazada (1) demuestran diferencias marcadas en la situación nutricional de los niños y niñas, según grupos de edad, condición y ubicación geográfica.

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